miércoles, 31 de julio de 2013

Para empezar: Anatomía

Lo primero que tenemos que conocer, para después entender cómo funciona, es la anatomía del suelo pélvico.

Aunque podría ser muy complejo si entramos a exponer cada músculo que lo compone, resultará muy sencillo si vemos unas imágenes y hacemos un ejercicio de imaginación.

No nos interesa saber qué músculos lo componen, ni cómo está colocado cada uno de ellos, ni de dónde a dónde van. Sólo debemos hacernos una idea general del suelo pélvico en su totalidad.

Pues bien, ahí va...



No. No me he confundido. Nuestro suelo pélvico tiene la forma de un paracaídas hinchado. Si vemos imágenes anatómicas del mismo, veremos que siempre ha sido representado como una copa, convexo desde abajo, pero eso es así porque hasta no hace mucho la información sobre anatomía se obtenía exclusivamente de lo observado en disecciones de cadáveres, y, claro, un cadáver está relajado. Y el suelo pélvico de un cadáver sí tiene forma de copa. Pero ahora, gracias a los avances en técnicas de diagnóstico por imagen, se ha podido observar que el suelo pélvico, en los individuos vivos, tiene forma de PARACAÍDAS, es decir, cóncavo si miramos desde abajo. Todas nuestras vísceras abdominales "caen" sobre la parte superior del paracaídas abierto.

Pues esto es lo primero que tenemos que tener claro. Si nos fijamos, esta disposición, le permite soportar el peso de las vísceras de una manera mucho más fácil.

Aquí van unas imágenes anatómicas clásicas para ilustrar lo que digo:




En esta lámina lámina, tenemos una pelvis femenina, tapizada con los músculos de llamado suelo pélvico. La primera sería mirando desde fuera del cuerpo de la mujer, como lo vería el ginecólogo cuando estamos en la camilla y la segunda sería mirando desde dentro del cuerpo de la mujer. Para que nos entendamos, como si nos cortasen el abdomen a la altura del ombligo y quitásemos todo lo que tenemos dentro y mirásemos hacia caudal, hacia los pies.

Pero no nos olvidemos de que estas láminas no son del todo correctas porque en nosotr@s, tendría forma de paracaídas (porque estamos vivos no?)

Para quien quiera saber algo más...

Ya podemos ir haciéndonos a la idea antes de seguir avanzando. Seguimos en breve...




martes, 30 de julio de 2013

Bienvenid@s

Hoy comienzo una aventura que espero que sea de vuestro interés.

Mi nombre es Eva Compés y soy fisioterapeuta especialista en Pelviperineología, o lo que es lo mismo y para que todos me entendíais, Suelo Pélvico.

La motivación para escribir este blog es la desolación que me produce el profundo desconocimiento que, en general, tiene la población sobre una región de nuestro cuerpo tan importante.

Si lo pensamos bien, es "ahí" donde radican funciones tan importantes como la micción y el control miccional, la defecación, las relaciones sexuales, el embarazo y el parto. Y, si esta zona no está en condiciones idóneas podemos presentar problemas de índole muy diversa. Desde dolores más o menos incapacitantes, incontinencia de orina, gases o de heces, prolapsos o descenso de vísceras abdominales, estreñimiento, problemas de distinto tipo a la hora de tener relaciones sexuales, etc.

Mi intención es ir explicando de forma amena y muy sencilla, cómo somos, cómo funcionamos, qué podemos hacer para mantener o/y mejorar nuestro suelo pélvico, qué hábitos debemos modificar y cuales adaptar a nuestra circunstancias, para tener una región pélvica saludable que nos permita disfrutar de situaciones cotidianas que hay gente que evita porque tiene molestias o escapes. Un paseo, una carrera, bailar, etc son actividades muy gratificantes si se pueden realizar y muy frustrantes si nuestro cuerpo no nos acompaña como debiera.

Me encantará resolver vuestras dudas y que me planteéis temas nuevos. Será enriquecedor para tod@s